martes, 10 de julio de 2012

... y me encontraba ahí, esperando más de lo normal mi turno para ser atendido, y de pronto veo algo extraño por el reflejo del vidrio, eras tú, pero a la vez no, la tercera vez que te veía de esa forma, que buscaba tu superficialidad, que buscaba tu apariencia. Y estabas ahí, tan bella, tan hermosa, quise regresar a ti y abrazarte como un niño abraza su bien mas querido, preferí seguir admirando tu belleza y mientras mas te observaba, más crecía mi sentimiento por ti, no había duda alguna, te quería mucho más que antes... Ahora digo con más firmeza que antes: Me he enamorado de ti"... Fuente: Augusto Aponte

No hay comentarios:

Publicar un comentario